Curso e-Druida

Emilio Monte Boquet

 

Todos sabemos que los medicamentos tienen una fecha de caducidad, que es aquella fecha hasta la que se garantiza la estabilidad de dicho medicamento en su envase original, no abierto ni manipulado y conservado en condiciones adecuadas.

Cuando un medicamento llega al usuario final del mismo, bien en una oficina de farmacia o en una farmacia hospitalaria, existe garantía de que lo hace en condiciones óptimas, ya que los estrictos requerimientos que deben cumplir todos los agentes implicados en la cadena del medicamento (laboratorio fabricante, distribuidor, oficinas de farmacia, servicios de farmacia hospitalaria y transportistas) garantizan que ha sido conservado adecuadamente en todo momento. Sin embargo, para que dicho medicamento mantenga todas sus propiedades y pueda ser utilizado en buenas condiciones de eficacia y seguridad, su conservación debe ser también adecuada por parte del usuario, aspecto que no siempre es tenido en cuenta y al que muchas veces no se presta la debida atención.

La estabilidad de los medicamentos puede verse afectada por múltiples factores, siendo los más importantes la temperatura, la humedad y la luz. Así, las altas temperaturas, la humedad elevada y la luz directa son factores que pueden alterar la estabilidad de los medicamentos y, por ello, deben conservarse en un lugar fresco, seco y alejado de la luz directa. Por tanto, teniendo en cuenta estos factores, hay dos lugares de la casa que, a pesar de ser frecuentemente utilizados para almacenar medicamentos, deben evitarse a toda costa: el cuarto de baño y la cocina, ya que se trata de las dos estancias donde se alcanzan con frecuencia condiciones de humedad y calor elevados.

Especial atención merecen los medicamentos termolábiles, que deben mantenerse entre 2 y 8 °C (es decir, que se deben guardar en el frigorífico). Estos medicamentos vienen identificados con un asterisco (*) en sus envases y con la frase “Conservar entre 2 y 8°C”.

 

 

Consejos generales para la correcta conservación de los medicamentos

Para garantizar una correcta conservación de los medicamentos, es importante seguir una serie de recomendaciones generales que son aplicables a todo tipo de medicamentos:

 

• Mantenga los medicamentos siempre fuera del alcance de los niños (bajo llave, si es posible).
• Lea atentamente el prospecto de los medicamentos y siga las instrucciones de conservación que se indican en el mismo.
• Conserve los medicamentos en su envase original para garantizar las mejores condiciones hasta la fecha de caducidad.
• Conserve el prospecto del medicamento, ya que contiene información importante que puede serle de utilidad durante el tratamiento.
• Tenga en cuenta la fecha de caducidad del medicamento y no lo utilice una vez superada.
• Tenga especial cuidado en caso de ola de calor, ya que puede afectar de forma importante a la estabilidad de los medicamentos.
• Vigile posibles cambios de aspecto de su medicamento (olor, color, consistencia…), ya que pueden ser señal de que ha habido un problema de estabilidad. Algunos medicamentos son especialmente sensibles y pueden sufrir estos cambios, como las cremas y pomadas, las suspensiones o los supositorios.
• Revise periódicamente su botiquín de medicamentos y retire todos aquellos que estén caducados y/o que hayan sufrido un cambio de aspecto o se encuentren en mal estado.
• Una vez caducados, deposite sus medicamentos en un punto SIGRE de una oficina de farmacia.

 

Medicamentos que deben conservarse a temperatura ambiente

A continuación se recogen algunas recomendaciones específicas para guardar y almacenar adecuadamente los medicamentos que deben conservarse a temperatura ambiente:

 

• Guarde los medicamentos en un lugar limpio, fresco y seco, protegidos siempre de la luz solar directa. Por ejemplo, se pueden guardar en el cajón de un armario o en una caja que se pueda cerrar y mantener en cualquier habitación que no sea el cuarto de baño o la cocina
• Para asegurar el buen estado de los medicamentos, es recomendable mantenerlos a una temperatura que no supere los 25ºC, si bien algunos medicamentos permiten temperaturas de hasta 30ºC. Consulte el prospecto para saber cual es la temperatura máxima a la que se puede conservar cada medicamento

 

Medicamentos termolábiles

A continuación se recogen algunas recomendaciones específicas para guardar y almacenar adecuadamente los medicamentos que deben conservarse entre 2 y 8ºC:

 

• Colóquelos en una zona del frigorífico donde haya menos variaciones de temperatura (por ejemplo, conviene evitar la puerta que es donde más variaciones hay).
• Colóquelos en una zona del frigorífico donde no puedan verse afectados por posibles derrames de contenido de bebidas o alimentos almacenados.
• Evite la congelación del medicamento, ya que afecta a la estabilidad del mismo. Si esto sucede o si hay sospecha de que pueda haber sucedido, deseche el medicamento.
• Tenga precaución durante el transporte del medicamento, especialmente en verano. Es recomendable utilizar neveras o recipientes isotérmicos y meter los medicamentos en el frigorífico de casa lo antes posible.
• Preste especial atención a la fecha de caducidad, ya que suele ser más corta que la de los medicamentos que se conservan a temperatura ambiente.

 

 

Validez de los medicamentos multidosis una vez abiertos

Como ya se ha comentado, la fecha de caducidad garantiza la validez del medicamento intacto y en su envase original, es decir, antes de utilizarse por primera vez. Los medicamentos multidosis (jarabes, gotas, inhaladores…) son uno de los grupos de medicamentos que más se pueden ver afectados por una inadecuada conservación y/o utilización. Es importante recordar que una vez abierto el envase multidosis el periodo de validez ya no viene determinado por la fecha de caducidad, sino que suele ser un plazo bastante más corto.

Habitualmente el periodo de validez de un envase multidosis viene especificado en el prospecto (incluso a veces en el propio envase). Sin embargo, en muchos casos no se encuentra información al respecto. En estos casos, aunque vamos a ver que hay descritas una serie de recomendaciones generales sobre cuánto tiempo se puede conservar este tipo de medicamentos una vez empezados, lo más recomendable es consultar con el farmacéutico el periodo de validez del mismo y, en cualquier caso, desechar el medicamento restante una vez finalizado el tratamiento.

 

A continuación se detallan unas recomendaciones generales:

• Antes de abrir un nuevo envase, revisar que no existe ya otro empezado.
• Al ser abierto el envase, anotar fecha de apertura y de caducidad.
• Nunca se debe superar la fecha de caducidad original (la del envase intacto).
• Siempre que sea posible, el envase se mantendrá dentro de su caja original.
• No deben conservarse envases abiertos sin tapón, ni ampollas empezadas, ni viales pinchados con aguja.

 

Estabilidad de medicamentos termolábiles fuera de nevera

Como ya se ha dicho, los medicamentos termolábiles son aquellos que deben conservarse entre 2 y 8ºC, es decir, en el frigorífico. Sin embargo, en la práctica es frecuente que se rebasen estos límites de temperatura en la práctica por diferentes motivos (averías en los frigoríficos, roturas de la cadena de frío durante el transporte del medicamento hasta el domicilio, despistes, errores…). En estos casos, es importante saber cuánto tiempo se puede mantener un determinado medicamento de nevera a temperatura ambiente sin que se vea comprometida su eficacia ni su seguridad.

El tiempo durante el cual un medicamento termolábil puede estar por encima de 8ºC es muy variable y depende de la propia naturaleza del medicamento, de la temperatura que se alcance, del tiempo durante el cual se hayan superado los 8ºC o de la presencia de otros factores externos como la luz solar o la humedad. Aunque en algunos casos esta información viene recogida en el prospecto del medicamento, lo más habitual es que no se disponga de la misma, por lo que lo más recomendable es consultar con el farmacéutico.

 

 

En definitiva, tenga especial cuidado en la conservación de los medicamentos en su domicilio, pues de ello puede depender que hagan todo su efecto y en las mejores condiciones de seguridad. Y no olvide consultar con su farmacéutico cualquier cuestión relacionada con este tema, él le ayudará a saber cuales son las mejores condiciones para guardar adecuadamente sus medicamentos.