Curso e-Druida

1. Nombre comercial del medicamento: Al igual que una persona, un medicamento tiene nombre y apellidos. Es decir, el medicamento con nombre y apellidos “PARACETAMOL 10 mg/ml SOLUCION PARA PERFUSION EFG” no solo se llama paracetamol, ya que, por ejemplo, el paracetamol puede ser de 500mg o de 1g y distintas dosis pueden tener efectos muy distintos sobre el mismo paciente. El nombre comercial, por lo tanto, se compone del principio activo, de la marca que lo comercializa, de la dosis y de la forma farmacéutica.
2. Principio activo: Es la sustancia química o biológica que realiza la acción sobre el organismo, de la cual se obtendrá un beneficio sobre el paciente (por ejemplo, el paracetamol, que actúa como analgésico).
3. Forma farmacéutica: Es la disposición en la que se encuentra el principio activo (por ejemplo cápsulas, comprimidos, inhalador…).
4. Vía de administración: Indica cómo se tiene que administrar el principio activo (por ejemplo vía oral, vía tópica a través de la piel…)
5. Código nacional: Es un número de 6 dígitos que permite identificar el medicamento de manera que a cada nombre comercial completo solamente le corresponda un código nacional. De esta manera, con solamente 6 dígitos se puede identificar un medicamento indiscutiblemente. En la compra y distribución de medicamentos es mucho más cómodo trabajar con estos dígitos, de esta forma te garantizas que se adquiere exactamente lo que estás solicitando.
6. Otra información muy útil que se encuentra en el envase también es el lote y la caducidad del producto. Esto permite garantizar la trazabilidad de los medicamentos en el caso de que se produzca una incidencia y se tengan que localizar los envases para retirarlos o ponerlos en cuarentena.

Además, habitualmente aparecen en los envases ciertos símbolos o siglas que hacen que nos preguntemos qué pueden significar, ya que a veces es difícil descifrarlos. Alguno de ellos son los siguientes:

 

Por ejemplo, las siglas EFG significan “Especialidad farmacéutica genérica”, es decir, los genéricos llevarán estas iniciales en su envase. Un genérico es un medicamento distinto al medicamentos de marca (llevarán distinto código nacional). Sin embargo, a nivel de una oficina de farmacia son intercambiables para su dispensación, puesto que ha superado ensayos de bioequivalencia que así lo demuestran.

Anecdóticamente, los envases pueden ser de 2 tipos:

• Envase primario: contiene la mayoría de información y suele presentarse en como una caja de cartón.
• Envase secundario: Es el que está en contacto directo con el medicamento. Puede tratarse de blíster (de aluminio, comprimidos), ampollas (de cristal, para medicamentos intravenosos), viales, jeringas precargadas…

 

Otro tipo de información que llevan los envases de los medicamentos es el cupón precinto. Éste identifica inequívocamente los medicamentos con receta financiados por el Sistema Nacional de Salud (el propio código de barras contiene el código nacional). Se encuentran troquelados para favorecer su extracción. Es decir, cuando acudimos a por un medicamento a la farmacia de la calle y es con receta, el farmacéutico de la farmacia retirará el cupón precinto para poder justificar que se ha vendido. Existen también unos medicamentos especiales que tienen cupón precinto, pero con un sombrerito en la parte superior (cupón precinto diferenciado). Estos medicamentos son particulares por ser poco seguros o de alto impacto económico, por lo que antes de ser dispensados en una oficina de farmacia deben visarse por parte de un farmacéutico.

 

En el caso concreto de los hospitales, existen algunos medicamentos especiales que pueden llevar las siguientes siglas:

• H: Uso Hospitalario. Es decir, estos medicamentos solamente se podrán usar a nivel hospitalario, y nunca se venderán en las farmacias de la calle. Es el caso, por ejemplo, de todos los medicamentos de administración intravenosa (muchos son los que van a través de gotero).
• DH: Diagnóstico Hospitalario. Estos medicamentos solamente se pueden recetar a través de un médico especialista o de un hospital. La mayoría de los medicamentos que llevan estas siglas en su envase se dispensarán en las farmacias de los hospitales, también por sus características especiales de seguridad o porque pueden suponer un alto impacto económico para el estado. Por lo tanto necesitan un control más exhaustivo para su dispensación.

 

En definitiva, la mayoría de los envases tienen mucha más información de la que nosotros nos pensamos y toda esa información es muy importante para conocer exactamente la medicación que está tomando un paciente. Por ejemplo, si surge alguna reacción adversa en el paciente se podrá identificar qué medicamento la ha estado produciendo, cual ha sido la causa y cómo solucionarlo.

 

¿Qué hemos aprendido?

1. El código nacional es único para cada medicamento. Se trata de un número de 6 dígitos que habitualmente comienza por 6 o por 7.
2. El principio activo es la sustancia que produce el efecto terapéutico.
3. Los medicamentos genéricos, que son igual de seguros y eficaces que los de marca, se pueden distinguir por las siglas EFG de su envase.